Ciedess en Pulso-La Tercera: Costo para empresas por proyectos de sala cuna y pensiones sería casi 1% del PIB

Movida estará la agenda legislativa durante este segundo semestre, sobre todo en materia previsional y laboral. Al reciente proyecto de ley de independientes, se suman el de teletrabajo, el de empleo para jóvenes estudiantes y el de sala cuna universal.

Adicionalmente, el Gobierno anunció que en septiembre enviará el nuevo proyecto que reforma el sistema de pensiones, aunque fuentes conocedoras del proceso aseguran que esto podría postergarse para la primera quincena de octubre.

Con este telón de fondo, Ciedess realizó un estudio que analiza el impacto del mayor costo para las empresas de dos de estas iniciativas. Por una parte, el proyecto de sala cuna universal, que sería financiado con el 0,1% de las remuneraciones de los trabajadores dependientes a cargo del empleador. Por otra parte, la reforma al sistema de pensiones, que según la definición que ha tomado hasta ahora La Moneda, se financiaría con un aumento gradual hasta llegar al 4% en la tasa de cotización obligatoria para la cuenta de capitalización individual, también a cargo del empleador.

¿Cuánto le van a costar ambos proyectos a las empresas? Casi un 1% del PIB una vez que entren en régimen, concluye el estudio. Esto, asumiendo la aplicación del beneficio de sala cuna a contar de 2019 (0,1% sin gradualidad) y el aporte a pensiones desde 2020 (se supone un aumento gradual de 0,5% cada año hasta alcanzar el 4% final).

Los resultados muestran que por concepto de sala cuna los empleadores aportarían anualmente el 0,02% del PIB, mientras que para pensiones los aportes se incrementarían cada año desde el 0,12% del PIB en 2020 al 0,94% del PIB en 2027, año en que se asume el 4% de cotización total adicional.

El gerente general de Ciedess, Rodrigo Gutiérrez, señala que “el impacto en los costos de las empresas por los proyectos de sala cuna universal y reforma al sistema de pensiones ascenderían casi al 1% del PIB una vez en régimen, es decir, superaría el gasto anual del sistema de pensiones solidarias, que alcanza al 0,8% del PIB”.

De este modo, en términos monetarios, el aporte adicional de los empleadores por ambos proyectos sería de unos $2.474.054 millones a 2028 (US$3.601 millones), cuando ambas iniciativas ya estarían funcionando con el 100% de las cotizaciones adicionales (ver tabla).
Considerando el salario promedio y el número de trabajadores, Ciedess calculó la masa salarial según tamaño de empresa, siendo la base de recursos para las futuras aportaciones por concepto de cotizaciones adicionales.

Bajo este contexto, las grandes empresas aportarían el 64% de la recaudación total anual de las nuevas cotizaciones, mientras que las micro y pequeñas empresas aportarían el 4% y 14% respectivamente.

Por tamaño de empresa. Para realizar el estudio, Ciedess consideró que el costo de estas medidas tiene diferentes efectos según el tamaño de las empresas, dado el número de trabajadores y el salario promedio de cada segmento.

El análisis concluyó que pese a que las micro y pequeñas empresas representan el 71% de las empresas totales (244.041 empresas), en términos de trabajadores sólo contienen al 26% del total de dependientes (1.249.206 trabajadores); mientras que las grandes empresas, con sólo el 3% de las empresas (11.766 empresas), abarcan el 52% del empleo dependiente (2.477.541 trabajadores).

Asimismo, el documento considera la remuneración promedio de los trabajadores según tipo de empresa, y muestra un incremento en el salario promedio a medida que el tamaño de ventas de las empresas crece.

De este modo, el salario promedio de un trabajador perteneciente a una micro empresa era de $413.202, mientras que los trabajadores de grandes empresas obtuvieron un promedio de $889.849.

Fuente: Pulso-La Tercera