Ley de Protección del Empleo benefició a casi 900 mil trabajadores

Desde abril de 2020, la Ley de Protección del Empleo se transformó en la herramienta más utilizada por las empresas para hacer frente a la crisis producida por la llegada de la pandemia del Covid-19 al país, ya sea a través de las suspensiones de contrato o mediante las reducciones de jornada.

Sin embargo, el pasado 6 de octubre finalizó la vigencia de dicha normativa, por lo cual terminaron automáticamente todas las suspensiones laborales vigentes por acto de autoridad (restricciones sanitarias), aquellas ligadas a crianza protegida (cuidado de niños por el cierre de establecimientos educacionales) y por mutuo acuerdo.

De acuerdo con datos de la Superintendencia de Pensiones -actualizados al 10 de octubre-, un total de 146.978 empresas ingresó solicitudes para suspender contratos, de dicha cifra. Un 76,5% de ellas tenía menos de nueve trabajadores y el 1,8% de las firmas con más de 200 dependientes.

En cantidad de trabajadores, ingresaron 1.024.917 solicitudes a la AFC para suspender contratos, de las que un 86,1% se aprobó (882.345 trabajadores con contratos suspendidos). El resto de las solicitudes, correspondiente a 142.572 trabajadores, se rechazaron.

Comercio la lleva

De las suspensiones aprobadas, 447.175 respondió a un pacto de contrato entre las partes, mientras que 541.222 a acto de autoridad debido al Covid-19 (cuarentenas decretadas por la autoridad). Además, 51.727 padres y madres pidieron suspender sus contratos para poder cuidar a sus hijos.

Al observar la información por sexo de los trabajadores, un 57,7% de las suspensiones aprobadas corresponde a hombres y el porcentaje restante a mujeres.

Por rubro, comercio lidera el listado en cantidad de trabajadores con sus relaciones laborales congeladas, con un 24% del total (211.594 personas). Le sigue construcción con un 19,7% (173.702 contratos) y actividades de alojamiento y servicios de comidas, con un 15,5% del total, lo que representa a un universo de 136.772 trabajadores.

Según la Superintendencia, si un trabajador registra solicitudes de distinta modalidad, se contabiliza una vez en cada una, pero solo una en el total. Esta cifra, por ende, no necesariamente cuadra con las de tipo de suspensión.

Fuente: DF