Salta el empleo informal entre migrantes en últimos años: la mayoría se va a la agricultura y ganadería

Ingresar al país por pasos no habilitados impacta de forma directa en la empleabilidad de los extranjeros, según lo corroboró un informe de la consultora Nómade Asesorías Migratorias. De hecho, el análisis advierte que la tasa de ocupación informal ha escalado casi 10 puntos porcentuales (pp.) en estos últimos tres años, pasando de 21,4% en 2020 a 30,9% en 2023.

Una cifra que supera a la nacional -sobre todo en los últimos 18 meses-, revirtiendo la relación que había persistido hasta la fecha, destaca el socio de la entidad y quien fuera director del Servicio Jesuita a Migrantes, José Tomás Vicuña.

Esta tendencia, que se desprende de los datos de la Encuesta Nacional de Empleo del trimestre julio-septiembre y la Encuesta Suplementaria de Ingresos 2022, se ha dado a la par con un alza sostenida de la participación de migrantes en el mercado laboral local.

Si en 2014 representaban el 3,6% del total de ocupados, para 2023 dicha cifra creció a 11%, totalizando 996.591 empleados. Esto se condice con que el país habría 1.625.074 personas extranjeras residentes, conforme a la información del Servicio Nacional de Migraciones

(Sermig) y el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).

De ese 11%, la población venezolana lidera (47%); seguido por Perú con 16,2% y Colombia con 14,2%.

Un zoom al 30% de informalidad muestra el alto peso que tienen la agricultura, ganadería, silvicultura y pesca, que explican más de la mitad de esa proporción.

Más atrás queda otras actividades de servicios (47,4%) y en tercer lugar transporte y almacenamiento con una tasa de informalidad (45,6%).

Para Vicuña son tres los factores que al menos explicarían el alza de la informalidad entre los extranjeros.

El primero de ellos se relaciona con la cantidad de personas que han ingresado por pasos no habilitados los últimos cinco años; el segundo tendría que ver con la Ley de Migración y Extranjería; y, el tercero con el porcentaje tope de personas extranjeras que puede contratar una empresa, que actualmente es de 15%.

"Si bien no todas las personas con tasa de ocupación informal están en situación migratoria irregular, en los últimos cinco años se han registrado más de 175.000 personas mayores de 18 años que han ingresado por pasos no habilitados. Esas personas no tienen ninguna posibilidad de trabajar formalmente", dice.

Además, opina "la Ley exige a la empresa contratar desde el extranjero, lo que para algunas ramas de la actividad económica como agricultura, servicios de comida o construcción se les hace muy difícil en la práctica".

Al mirar la situación por nacionalidad, se observa que las personas provenientes de Bolivia y Venezuela son las que han mostrado la mayor variación en sus niveles de informalidad, llegando a tasas de 40,8% y 32,1% respectivamente.

Precisamente, señala que son las dos nacionalidades que presentan mayores ingresos por pasos no habilitados de 2020 a la fecha, sobre todo el primero. "Esto repercute en el aumento de la tasa de ocupación informal. En Bolivia, además, se explica por la mayor presencia que tienen en agricultura, uno de los sectores con más altas tasas de ocupación informal", afirma Vicuña.

Medidas de corto plazo

Para el vocero, estos datos reflejan la urgencia de avanzar en políticas públicas concretas para mejorar la situación de la población migrante en el país.

Y, por lo mismo, plantea tres medidas para el corto plazo: regularizar a quienes se han empadronado, teniendo como criterios su situación laboral y/o arraigo familiar en Chile; aumentar el tope de contratación de personas extranjeras, diferenciando según sectores y regiones; y la publicación con pronta implementación del reglamento de convalidación de estudios.

"Si queremos promover la formalidad laboral en la población migrante, es obligación modificar el tope de contratación de extranjeros, como lo señalan múltiples estudios al respecto. La misma Ley de Migración y Extranjería en un principio lo contempló, pero luego el Parlamento lo desechó. No hay porqué imaginarse un tope fijo para todo el mercado laboral. Puede ser algo más dinámico. Que sea mayor en algunos sectores y/o algunas regiones. O que varíe según el período del año, tomando en cuenta sectores como agricultura o turismo, por ejemplo", argumenta.

Fuente: DF