El 40% de los recursos de la agenda social es para mejorar las pensiones

Pensiones es uno de los grandes focos que puso el gobierno en el anuncio que hizo de medidas sociales. De hecho, este ítem concentra el 40% del total de los recursos que se destinarán para la agenda social. Esto, considerando que todos los anuncios costarán US$1.200 millones, y para pensiones serán en torno a US$500 millones.

Los ajustes se harán vía indicación al proyecto de ley que ya está en el Congreso, la que el Ejecutivo pretende presentar mañana viernes. ¿Pero cuáles son los cambios que anunció el Presidente Sebastián Piñera y cómo se comparan con lo que ya existía en la reforma?

El proyecto planteaba un aumento inmediato de 10% de la Pensión Básica Solidaria (PBS) y del Aporte Previsional Solidario (APS), pero el mandatario anunció que ese incremento ahora será de 20%, apenas se apruebe el proyecto de pensiones.

Estos beneficios están destinados al 60% más pobre de la población. A la PBS puede acceder una persona que no ha cotizado en el sistema y que no tiene derecho a ningún tipo de pensión, mientras que el APS es un beneficio destinado a quienes cotizaron en AFP, pero que no lograron ahorrar como para lograr una pensión sobre $325.646.

También habrá un aumento adicional a ese 20% para los APS y las PBS para las personas mayores de 75 años, el que empezará a regir en 2021.

La reforma planteaba que a mayor edad, más subía la pensión de los beneficiarios del Pilar Solidario, por lo que proponía cinco tramos de edad: a los recién jubilados les subía 10% la pensión, y cuando esa persona cumpliera 70 años, su pensión sería un 19% superior. Así sucesivamente aumentaba la pensión cada cinco años, hasta cumplir los 85 años.

Sin embargo, con el anuncio del Presidente, esos tramos se eliminarían y quedarían solo tres: menores de 75 años recibirán una pensión 20% superior, mayores de 75 años tendrán una nueva alza que aún no es comunicada, y según fuentes conocedoras del proceso, los mayores de 80 años también percibirían otro incremento en su pensión.

El Presidente anunció además que habrá aportes de recursos fiscales para complementar el ahorro previsional de la clase media y las mujeres que trabajan y cotizan. Si bien la reforma previsional proponía lo mismo, donde los beneficios empezarían a regir desde el segundo año en que se apruebe la reforma, el cambio radicaría en que se adelantan los beneficios al primer año, y además se rebajan los requisitos, permitiendo que más personas se vean beneficiadas.

Adicionalmente, el mandatario comprometió recursos públicos para mejorar las pensiones de los adultos mayores no valentes. Esto implicaría fortalecer un mecanismo que ya venía en la reforma previsional: el subsidio de dependencia.

Fuente: La Tercera-Pulso