CMF: carga financiera de los chilenos subirá en 2022 y volverá a niveles de pre pandemia

Una señal de alerta entregó ayer el presidente de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), Joaquín Cortez, junto a la directora de Estudios, Estadísticas y Datos del ente regulador, Nancy Silva, al presentar la octava versión del Informe de Endeudamiento correspondiente a 2021.

Si bien en 2021 la carga financiera de los chilenos llegó a un nivel de 15,3%, el más bajo en los últimos seis años, se espera un repunte para 2022, impulsada por mayores tasas de interés que incrementarían la deuda de los hogares.

La carga financiera es el porcentaje del ingreso mensual que una persona destina al pago de sus deudas.

Silva explicó que, debido a que "las tasas de interés han estado aumentando desde mitad del año pasado, estimamos que las cargas financieras van a aumentar en el futuro".

Estimó que "hace un año y medio estaba en 19%. Deberíamos volver a niveles de esa magnitud".

En cuanto a la caída de la carga financiera en 2021 respecto a los últimos años, precisó que ésta se vio impulsada por una reducción del stock de la deuda y una baja en las tasas que se mantuvo hasta la primera mitad de 2021, principalmente en consumo.

Niveles de deuda

A junio de 2021, el nivel de deuda representativa de los deudores bancarios, definido por la mediana de la distribución, fue de $ 1,87 millones, anotando una caída anual de 17,7%.

El segmento entre 40 y 45 años exhibió el mayor nivel de deuda con $ 5,5 millones, mostrando una alta correlación con las decisiones de compra de vivienda.

Mientras que los indicadores de carga financiera y apalancamiento fueron de 15,33% y 2,96 veces el ingreso, respectivamente.

Al compararlo con el período anterior, se observó una disminución de la deuda. Esto, principalmente por las políticas implementadas para enfrentar los efectos de la pandemia -como las transferencias fiscales y los retiros de ahorros previsionales- y a las bajas en las tasas de interés observadas durante los primeros meses del año pasado.

Silva resaltó que "el comportamiento de pago de los chilenos es sumamente positivo en comparación internacional. Es una fortaleza del sistema financiero".

Clase media

Sin embargo, uno de los aspectos que preocupan a la CMF es que "la clase media tiene dificultades en el pago y muestra la mayor presión en términos de carga financiera. Entre los deudores que destinan más del 50% de sus ingresos mensuales, el grueso está concentrado en personas con más de $ 1,7 millones mensuales de ingresos", dijo Silva.

Otros factores que podrían afectar el comportamiento de pago son los eventuales aumentos en las tasas de desempleo debido al menor dinamismo económico que se proyecta para 2022.

Flujo de ingresos

Silva también se refirió a la evolución de la morosidad en 2022, considerando que en el ejercicio anterior llegó a niveles mínimos.

"Esto va a depender de los flujos de ingresos más que de las tasas de interés porque la variación de las tasas de interés modifica la decisión de tomar o no deuda y de los bancos de ofrecer o no a los clientes", sostuvo.

"Los clientes están al día en una gran mayoría y va a depender del flujo de ingresos que se genere en el futuro", añadió.

Más que el efecto de mayores tasas, "lo que nos importa observar en la morosidad es cómo se desarrolla la actividad económica y cómo evolucionará el PIB en los siguientes años y el empleo".

Agregó que en la medida los niveles de empleo se mantengan estables, "probablemente los índices de mora sigan en los niveles que están ahora o retornen a promedios históricos normales".

Cortez destacó la relevancia de monitorear las reprogramaciones de créditos que hizo la industria: "Lo importante es ir observando cómo se están comportando los deudores una vez que terminan las reprogramaciones. Estamos siguiendo eso muy de cerca y hasta ahora no hemos observado nada anormal", mencionó.

Deuda consolidada

Al momento de plantear los desafíos, recalcaron la importancia de contar con un registro consolidado de deudas.

A juicio del regulador, esto permitiría medir de forma más consistente las distribuciones de los niveles de endeudamiento de los hogares. Añadieron que un segundo beneficio es que permitiría evaluar correctamente la capacidad de pago de los clientes del sistema financiero, contribuyendo a una inclusión y desarrollo del sector más saludable.

1,8 $ MILLONES ES LA MEDIANA DE LA DEUDA BANCARIA EN 2021.

Fuente: DF