Presidenciables coinciden en que la paz social es necesaria para el desarrollo de las empresas
José Antonio Kast (P. Rep), Marco Enríquez-Ominami (PRO), Yasna Provoste (DC) y Sebastián Sichel (Indep. centroderecha) se vieron las caras ayer en Erede 2021.
Fuente: DFPublicado el 08 de octubre de 2021.Un nuevo cara a cara tuvieron ayer algunos candidatos presidenciales en el marco de su participación en el Encuentro Regional de Empresas del Biobío, Erede 2021, ocasión en la que abordaron temas tales como empleo, descentralización y macrozona sur, en un debate que no estuvo exento de críticas entre los aspirantes a La Moneda y en el que el gran ausente fue el representante de Apruebo Dignidad, Gabriel Boric (CS).
Respecto de la situación de violencia que afecta a la macrozona sur, tanto Yasna Provoste (Nuevo Pacto Social) como Marco Enríquez-Ominami (PRO), José Antonio Kast (Frente Social Cristiano) y Sebastián Sichel (Chile Podemos Más) coincidieron en rechazar la violencia y en plantear la necesidad de alcanzar la paz social, para que las empresas se puedan desarrollar.
En materia de empleo, Kast y Sichel hicieron especial hincapié en la necesidad de generar "reglas claras" y restablecer el Estado de Derecho en la zona que, a juicio de ambos, se ha perdido. Esto contribuirá a que no sólo las grandes empresas se puedan desarrollar, sino también las PYME.
Revolución tributaria
Kast insistió en el aporte que a ello puede significar su propuesta de "revolución tributaria", que implica bajar el impuesto de las empresas del 27% al 17% y el IVA del 19% al 17%.
A ello agregó revisar a la baja otros gravámenes, como el impuesto a la herencia, el de timbres y estampillas, junto con recuperar la depreciación y la reinversión.
"Lo que generaría un círculo virtuoso de mayor recaudación, porque habrá más personas pagando, más emprendedores, y a la gran empresas eso también le va a favorecer (...), para que pueda generar más emprendimiento", argumentó.
La senadora Provoste, quien participó de manera telemática, destacó que la Región del Biobío es la que cuenta con más manufactura de Chile, con sobre el 20% del PIB regional, y "por eso que los encadenamientos productivos son particularmente clave, ya que muchas empresas y empleos dependen de que los grandes proyectos funcionen y lo hagan bien".
En este sentido, profundizó en que es necesario una macroeconomía "responsable" que permita el acceso a financiamiento para los grandes proyectos; un plan integral para que los grandes proyectos de inversión sean aprobados de manera expedita, velando por los estándares medioambientales y sociales. Pero también hizo hincapié en generar programas de innovación y desarrollo para que las empresas se puedan proyectar y hacer crecer a las comunidades.
Por su parte, Sichel planteó la necesidad de confiar en la innovación como estrategia de desarrollo en que las grandes empresas se asocien con las pequeñas y emprendedores, transformando a las primeras en verdaderas "naves nodrizas de innovación"; recuperar el crecimiento, llegando a un crecimiento tendencial de cerca del 3%, estableciendo reglas del juego que impidan la burocracia, restablecer el Estado de Derecho, apoyar el desarrollo empresarial e impulsar la adaptación a la revolución industrial.
Marco Enríquez-Ominami fue enfático en que "sin paz no hay industria y Chile debe conquistar la paz social" para avanzar. También planteó que el Estado debe proteger a las industrias propiciando el término del dumping y la conectividad con América Latina.
"Sí, vote por Piñera y estoy muy arrepentido"
En cuanto a la violencia en la macrozona sur, los candidatos coincidieron en la necesidad de darle una salida política y en condenarla. Sin embargo, Sichel fue categórico en que el Estado debe intervenir, apoyándose en las Fuerzas Armadas para ello.
Los candidatos lamentaron la ausencia de Boric, pero ello no fue obstáculo para que se produjeran algunos enfrentamientos entre los aspirantes a La Moneda.
Uno de estos episodios se dio entre Kast y ME-O, ya que este último le enrostró al candidato del Partido Republicano haber votado por Sebastián Piñera, a quien responsabilizó de haber sido "un desastre en materia de seguridad" en la macrozona sur, a lo que Kast replicó: "Sí, voté por Piñera y estoy arrepentido, muy arrepentido. Una de las causas por las que estoy arrepentido es porque dejó abandonadas a las víctimas. Se comprometió con ellas y no cumplió su palabra". Y criticó a ME-O por negarse a reconocer que hay terrorismo en la zona.
Fuente: DF